Pocas cosas hay mejores que leer algún fragmento escrito por Fernando Pessoa o algún fragmento que él haya escogido para ser traducido, donde de repente, hay algo que a uno le sorprende y lo eleva.
Continuando y releyendo algunos Rubaiyat me sorprende éste trasladándome a miércoles de ceniza (a un miércoles de ceniza de cuando era niña, pues ya hace tiempo que no se evoca ni una penitencia real y fiel para no “espantar” ni una renovación espiritual como debe ser): Memento, homo, quia pulvis es et in pulverem reverteris.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada